Mi opinión general sobre este coche es bastante buena. Ahora mismo tiene 180.000 kms. y sólo he tenido que realizar una reparación importante (dirección asistida). Por lo demás, sólo el mantenimiento habitual. En mi opinión combina perfectamente confort y deportividad, es suave y silencioso en bajas revoluciones y tiene la fuerza y potencia progresiva del motor v-tec cuando sube de vueltas. En cuanto al diseño, para mí es perfecto y hay muy pocas berlinas en el mercado que puedan superarlo en este aspecto.
Una pena que Honda ya no volverá a comercializar el Accord en Europa. Lo volvería a comprar sin duda.
Soy propietario de un Honda Accord i-CTDi Sport con 140 cv desde mayo de 2006, comprado nuevo en el concesionario oficial de Honda en Vigo.
En su momento me pareció, con los datos en la mano que era la mejor berlina media diésel de potencia media y tracción delantera del mercado, opinión que se ha visto refrendada después de estos 10 años y 200.000 Km de uso.
El coche mecánicamente es una delicia, aún hoy pese al paso del tiempo y de los Kms sigue manteniendo un agrado de uso sobresaliente y una agilidad mecánica envidiable. Es de reseñar la entrega de potencia, muy progresiva, y con más sensación de acabarse más tarde que en otros modelos de la competencia de similares características/peso/potencia (A4, Passat, Laguna, C5...). El tacto de conducción es fantástico; una dirección con un tacto excepcional y un aplomo envidiable en todo tipo de curvas, pero sobre todo en las rápidas y con asfalto en no muy buenas condiciones, donde se aprecia el buen trabajo de unas suspensiones de calidad con un diseño de doble paralelogramo deformable en ambos ejes. Por el contrario, aún siendo de dureza suficiente para una conducción ágil o próxima a lo deportivo, en extensión son quizás un poco blandas (no en compresión, donde ya he dicho que son lo suficientemente firmes), lo que crea cierta inseguridad a la hora de ir rápido para el conductor que lo conduzca por primera vez, sobre todo en cambios de apoyo rápidos. No obstante, una vez acostumbrado a esta particularidad, el coche transmite una seguridad activa notable y de este modo no se compromete el confort de marcha, que es elevado.
El motor es silencioso, potente, con un elevado par y totalmente contruído en aluminio. Es un motor premiado como el mejor del mundo dentro de la cilindrada de 2.0 a 2.5, lo que da idea de lo bien elaborado que pudo haber estado, teniendo en cuenta que compitió por ese premio con lo más granado de las motorizaciónes de cilindrada media del mercado mundial incluyendo los de gasolina, motores de un agrado de uso superior a los diésel.
En cuanto a la caja de cambios manual, simplemente decir que es la mejor que he probado en mi vida, y no han pasado pocos coches por mis manos, la verdad. Precisa, de tacto firme, ergonómicamente muy bien ubicada tanto por posición como por longitud de la palanca, y con una sensación de interruptor eléctrico con los pasos muy bien definidos y con un sonido clack-clack en cada cambio que la hacen adictiva.
En cuanto a consumo con neumáticos 225/45-17", es normal para su uso en ciudad (6,3~6,5) y muy bueno por autopista a 120 Km/h sostenidos (5,1~5,2) teniendo en cuenta el peso y tamaño del coche y que es un motor de cilindrada alta para lo que se estila en el segmento (2.200 cc). Sin duda una conseguida aerodinámica ayuda bastante en esta medición.
El coche ha envejecido fantásticamente, presenta a nivel estético una línea aún bastante actual gracias a un diseño que en su día era un poco "áspero" con líneas bastante marcadas en un momento en que no se apreciaban apenas aristas en las líneas maestras de diseño que aparecían más redondeadas y suaves como se puede ver en los Mazda6, Clase C o A4 de la época. En cuanto a desgastes, simplemente genial: ni un botón decolorado, ni un plástico desteñido, ni un muelle que accione ninguna de las guanteritas, portamonedas, portavasos o portagafas vencido ni averiado (y les doy uso intensivo). Los tapizados, tanto puertas, como asientos como techo y montantes se encuentran de 10. Sólo el asiento del conductor, presenta unas leves arrugas en los laterales, pero nada exagerado y dentro de lo perfectamente normal por el uso recibido.
En resumen, un coche de 9,5. Me llama la atención que cuando lo compré cayó en mis manos un estudio de muchísimos vehículos donde se valoraba el grado de satisfacción de los propietarios con sus coches y el resultado de mayor satisfacción lo obtenía el Honda Accord 7ª generación (2003~2007). Sin duda acertado.
Sólo un precio de tarifa más próximo a la terna premium alemana que a los generalistas europeos del momento y una red comercial no tan implantada como la de estas marcas impidieron que fuese un éxito de ventas. Es una pena que un coche de esta calidad no haya sido un superventas, porque mimbres para haberlo sido los tenía.